La música que surgió del frío
agosto 05, 2008
Islandia: 300.000 habitantes. Capital: Reykjávik: 155.000 habitantes.
30 salas de música en directo, 62 locales de ensayo, 90 bandas de música (Pop, rock, electrónica, folk, jazz)
Que les pasa a los islandeses y esa querencia por la cultura musical?
La música islandesa golpeó la escena internacional con Björk y Sugarcubes. Varias bandas y actuaciones en solitario de la pasada década han seguido tocando, Sigur Rós, Múm, Bang Gang, Mugison, Minus y Slowblow son algunos de los nombres más recientes, y aparecen algunos incluso más impronunciables si echamos un vistazo a los últimos años. “Es diferente”, es la primera reacción de la mayoría de la gente al oír esta heterogénea música, pero extremadamente original. ¿“de dónde viene todo esto”?.
Al límite del mundo inhabitable, arriba, en el Atlántico-Norte, el islandés ha pasado largos siglos aislado, durante oscuras centurias se fueron perfilando pacientemente su humor cáustico, sus melodías excéntricas, y su poesía antigua. La música antigua, venida desde épocas medievales, es uno de los secretos del sonido único Islandés, el aullido de la tormenta ártica y las olas rompiendo en la costa rocosa, puede ser otro.
Sea cual fuese la explicación, el islandés ha abrazado una escena de la música con un sonido y una actitud que es toda su esencia, mezclando los sonidos antiguos y los contemporáneos, electrónicos, rock, Pop e influencias clásicas, para producir su propio estilo ecléctico. Screaming masterpiece la película/documental transmite plenamente la fuerza de la escena explosiva de la música islandesa con sonido Dolby 5.1.
Seguimos las actuaciones desde su casa en Islandia hasta sus viajes por el mundo, de Nueva York a Tokio. La película ha tardado dos años en su realización y conduce al espectador, a través de las escenas, a la irresistible musica Underground de Reykjavik. Los glaciares moviéndose lentamente, las arenas estériles de la montaña y los embravecidos y oscuros mares llenos de espíritus, forman el contexto de la fría energía de su música. Altamente recomendable.
Viva Islandia, coño!!
Puntuación: 9
Ramírez.
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