Para que un musical funcione (para que funcione para mí, por lo menos) es necesario que..... (1) las canciones sean atractivas, pegadizas y agradables al oído y que (2) haya una historia de fondo lo suficientemente interesante como para atravesarla de la mano de dichas canciones. En Moulin Rouge, por ejemplo, ambos elementos están presentes. En Sweeney Todd, la historia funciona e interesa, pero la música no (salvo un par de excepciones, las canciones no me gustaron nada).



Y en Across the Universe lo que falla es justamente la historia, que prácticamente brilla por su ausencia. Los covers de los Beatles están bien en su mayoría (Hey Jude, Come together, Strawberry fields) pero es casi lo único que está bien. Para colmo las actuaciones son muy medocres, al igual que el guión, y el protagonista va pululando de un lado para el otro sin carisma ni objetivos narrativos concretos. La historia es un pastelaco infumable pero se pueden rescatar algunas canciones y un par de escenas que indican una dirección artística bastante cuidada, momentos psicodélicos muy buenos....pero más allá de eso la película sencillamente me decepcionó.

Puntuación: 4

Ramírez.