Estamos en la semana de los Premios Oscars y este año queremos acercarnos a tan importante celebración del cine mundial de una manera diferente, hemos buceado a través de los años y diferentes galas para indagar cuales han sido las producciones nominadas a mejor película (o premiadas) que más nos han descolocado, que por su discutible calidad no merecían estar nominadas, de ahí el título de ¿QUÉ HACE UNA PELÍCULA COMO TÚ EN UN SITIO CÓMO ESTE?.

Veamos algunos ejemplos de producciones  WTF? que fueron nominadas al Oscar a mejor película.


BABE, EL CERDITO VALIENTE (Chris Noonan, 1995)

 Aparte de mejor película, optó a otras 6 nominaciones en la 68º edición de los Premios Oscars, una cinta floja e infantiloide que con todos mis respetos, no merecía estar ni de lejos como candidata, sobretodo si vemos que películas como: Doce monos, Sospechosos habituales, Toy Story, Casino (Martin Scorsese), Heat (Michael Mann), Los puentes de Madison (Clint Eastwood) y ojo... ¡¡la magnífica Seven de David Fincher!! no fueron incluídas entre las nominadas. Nos encontramos ante uno de los años más desatrosos que la historia de la Academia recuerda. Algunos se están tirando de los pelos todavía.

LA GANADORA DE ESE AÑO FUE: Braveheart. 



 CAMPO DE SUEÑOS (Phil Alden Robinson, 1989)
 También a día de hoy, muchos de nosotros seguimos flipando muy fuertemente con este sensiblero telefilm de sobremesa protagonizado por Kevin Costner que optó a mejor guión adaptado, mejor banda sonora y mejor película.

En serio que no se merecían entrar antes otras películas como: Haz lo que debas (Spike Lee), Delitos y faltas (Woody Allen), Abyss (James Cameron) Indiana Jones y la última cruzada (Steven Spielberg) u otra comedia más solvente como Cuando Harry encontró a Sally?

LA GANADORA DE ESE AÑO FUE: Paseando a Miss Daisy



CHICAGO (Rob Marshall, 2002)

 Para poner punto y final a esta pequeña galería de la ignonimia, nos topamos con una película que no sólo fue candidata, sino galardonada con 6 estatuillas, entre ellas, como mejor película. Chicago, un musical ridículo y chirriante, carente de historia y originalidad que fue sobredimensionado por la crítica especializada, un La La Land de principios del XXI, bueno, la película de Chazelle es una obra maestra en comparación a esta. 
Nuestra indignación aumenta al comprobar que películas como: Camino a la perdición, La última noche, Lejos del cielo, Domingo sangriento y ¡¡Ciudad de Dios!! fueron absolutamente ninguneadas por los lumbreras académicos.